En las primeras horas de la tarde de ayer se produjo un hecho lamentable: pequeños delincuentes se metieron en el edificio (pendiente de demolición, sobre calle San Martín) de la Escuela Normal y desde el segundo piso tiraron un elemento contundente de hierro a los alumnos que estaban en el patio entre medio de los dos edificios. Un niño de 8 años resultó herido en el cuero cabelludo por el letal elemento (18 cm de diámetro y casi 2 kg de peso) y hubo que hacerle cuatro puntos de sutura.
El riesgo de perder la vida gracias al accionar de estos pequeños vándalos fue milimétrico, dado que de no ser por el reflejo del niño hoy estaríamos hablando de otra cosa y no de una herida precisamente.
Como ves en la foto el estado del edificio es deplorable y en muchas oportunidades se meten estos vándalos por las ventanas que están marcadas, dado que al no tener trabas se las atan con alambre y, lógicamente, es sencillo cortar.
Se efectuó la denuncia policial correspondiente por parte de la Escuela y de los padres del alumno herido.
Por otra parte, hoy a partir de las 13 hs los docentes del turno tarde de esa Escuela realizarán una concentración y retención de servicio, por el episodio mencionado. Y claro, la paciencia se agota rápidamente, sobre todo porque este edificio debería haber sido demolido hace años y curiosamente la Diputada Miriam Lambert publicó el 26 de junio de este año que se habían abierto los sobres de licitación para este trabajo... y aún no hay nada.
¿Que debería pasar para que esto se cumpla? ¿Otra elección? ¿O lamentar una víctima fatal?
Foto: Rubén Coman
Fuente: Lucas M. Beber