Hernán José Sigot, un constructor de 41 años de edad, domiciliado en Villa Elisa, fue condenado a prisión efectiva en la ciudad de Colón, por hechos de amenazas y desobediencia judicial. Fue en juicio abreviado, sentencia de la cual fue notificada la víctima que prestó su conformidad.

La medida fue impuesta por la jueza de Garantías de esa ciudad, doctora Natalia Céspedes, en audiencia desarrollada este viernes en el Juzgado de Colón, en una causa que llevada adelante el fiscal Alejandro Perroud.

Sigot, representado por un abogado colonense que no quiso ser nombrado, estaba acusado de hechos de amenazas y desobediencia judicial, como ser lo sucedido el 21 de octubre de 2018, cuando el imputado envió dos audios mediante la red de mensajería whatsapp, amenazando de muerte a su grupo familiar (ex pareja e hijos menores de edad).

Otro de los hechos fue el de fecha 10 de mayo del corriente, en avenida Urquiza entre bulevar  Schroeder y Castelli de la ciudad de Villa Elisa, cuando amenazó a su ex pareja, que se hallaba trabajando en una farmacia.

La mujer dio aviso a la policía y el fiscal dispuso la aprehensión en flagrancia de Sigot por el delito de amenazas y desobediencia a una orden judicial, pero este sujeto no cambió la actitud y en sede de la Comisaría de Villa Elisa, volvió a proferir amenazas hacia su ex pareja, en presencia de los testigos, por lo que se le imputó también esa conducta.

En definitiva a Hernán José Sigot se le imputaron tres hechos de amenazas simples y un hecho de desobediencia (la escala penal que contempla penas que van de los 6 meses de mínimo a los 7 años como máximo de prisión).

Los hechos acontecieron en un marco de violencia familiar y de género que se extendió durante varios años, incluso, en febrero de 2017 el Juzgado de Familia resolvió privar a Sigot de su responsabilidad parental.

Debido a este tipo de conductas, el imputado fue evaluado por el Equipo Técnico Interdisciplinario, como también por la Trabajadora Social, de cuyos informes surge que el mismo presenta “Trastorno de personalidad antisocial”, que se caracteriza por un patrón dominante de inatención y vulneración de los derechos de los demás.

Este año, más concretamente el 2 de julio presentaron la remisión a juicio de la causa, pero finalmente en audiencia de juicio abreviado celebrada este viernes, el imputado admitió la responsabilidad por los delitos de amenazas y desobediencia a la autoridad, y aceptó la pena de tres años de prisión efectiva a cumplir en la Unidad Penal N.º 9 de Gualeguaychú.

Fuente: 03442