El fenómeno de Javier Milei amenaza la grieta. Es decir el escenario político que se divide en dos con las principales coaliciones: el Frente de Todos y Juntos por el Cambio.
La memoria reciente del mal gobierno de Mauricio Macri y la incapacidad de solucionar algunos de los problemas, e incluso empeorarlo, del gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner, dieron lugar a una propuesta que se sustenta en un solo elemento sensato: la expresión del desencanto, cuando no en la rabia. Ahí construye el economista.
En un trabajo de Eje Consultora, realizado para los colegas de
Página Política, se analiza el trasvasamiento de la propuesta de Milei en el plano de lo ideológico y las franjas socioeconómicas.
El primer interrogante que se empieza a despejar es si efectivamente una buena performance del “libertario” sólo perjudica a Juntos por el Cambio.
“El criterio ideológico es sólo una parte del análisis. El descontento con la política, acicateado por la incertidumbre económica y la alta inflación, hace que Milei sea un emergente que canaliza una bronca social contenida que sobrevuela y excede las barreras ideológicas, lo que ayuda a entender cómo sectores y estratos sociales que han sido históricas bases electorales del peronismo empiecen a migrar hacia el libertario, y esto no significa que adscriban a la escuela austriaca de economía”, dicen los politólogos Nahuel Baridón y Lautaro Reyes luego de analizar los números que fueron recogiendo en las encuestas realizadas durante el último tiempo.
Para los autores, “este voto hacia Milei no se rige por cuestiones identitarias vinculadas a los partidos políticos, ya que la identidad partidaria es una etiqueta que no tiene anclaje en esta franja, atraída más por discursos de corte transgresor o rupturistas. Justamente la característica distintiva de Milei es su discurso anti sistema y su diatriba contra lo que llama ‘la casta política’. Esto hace que la fuga de votantes del Frente de Todos hacia su espacio sea más sorprendente que la de la coalición opositora a pesar de ser menor”, dice el trabajo de la firma local que realiza estudios en base a consultas presenciales y con un sistema que distingue zonas y clases sociales en el territorio en el que se toman las muestras.
Números
En un sondeo de alcance provincial aparece un dato interesante. Con 1300 casos relevados en las 4 ciudades más grandes (Paraná, Concordia, Gualeguaychú y Concepción del Uruguay), ante la pregunta sobre la situación del país, el 44% cree que va a empeorar y el 34% que se mantendrá igual. Solo el 21% cree que va a mejorar. El dato revelador aparece cuando se desagrega esta pregunta según la franja etaria. Entre los jóvenes esa falta de expectativas trepa al 52%. El campo registra que el 30% son jóvenes de entre 16 y 29 años.
En ese trabajo Milei aparece con una imagen muy similar a Cristina Fernández, Alberto Fernández y Horacio Rodríguez Larreta.
En Nogoyá se hizo una muestra de 300 casos dividiendo la ciudad en 6 zonas. Los números son los siguientes:
Cuando se pregunta por qué fuerza política votaría si las elecciones fueran este domingo, aparece una paridad entre los potenciales votantes de Juntos y los libertarios. El dato más importante del gráfico es el altísimo porcentaje de indecisos.
También con 300 casos presenciales, en un trabajo realizado en Federal, donde gobierna el PJ, ante la misma pregunta, es decir, intención de voto por fuerza política, los libertarios se ubican como tercera fuerza.
Los últimos sondeos, durante los primeros días de abril, se realizaron en La Paz, gobernada por Juntos por el Cambio. El resultado fue el siguiente:
Baridón y Reyes cuentan que un detalle que no aparece en las planillas y que es verificable porque el trabajo es presencial. En las reuniones con el equipo de la consulta, que integran quienes salen al territorio, se desprende un dato: quienes dicen votar a Milei lo hacen convencido, casi jactándose. Mientras quienes lo hacen por las coaliciones aducen una tradición. El comentario no es menor si se mira la franja de indecisos.
Fuente: Página Política