El gobernador entrerriano mandó a su tropa a sondear ambas alternativas. Darle competitividad al PJ, la clave. La oposición desconfía.

Antes de partir en su misión oficial a Vietnam y Singapur, el gobernador Gustavo Bordet dejó una indicación muy clara: le pidió al presidente de la Cámara de Diputados, Ángel Giano, que elabore un proyecto de ley de reforma electoral que proponga la Boleta Única de Papel como sistema de votación para las elecciones provinciales. Además, según pudo reconstruir Letra P, el mandatario dejó la indicación de poner en debate la posibilidad de implementar la ley de lemas, como ya hicieron este año sus pares de otras provincias.

Leales a su jefe político, eso es lo que están haciendo desde hace unos días los feligreses de Bordet. Cuentan las fuentes consultadas que la iniciativa de la BUP volvió al escritorio del gobernador tras el entusiasmo que le generó el éxito del sistema electoral en Brasil.

El modelo de boleta única que Bordet quiere para Entre Ríos es el santafesino, con boletas por categoría. Sin embargo, quienes participan de la redacción del texto no descartan consultar el modelo cordobés, ambos de la Región Centro.

Fuentes del círculo rojo bordetista aclaran que si bien la BUP es un pedido del gobernador, debe recoger consensos al interior del frente oficialista. Para esa titánica tarea, el mediador designado fue Giano, soldado que por estas horas agota todas las instancias de negociaciones.

En el contexto de esas conversaciones, apareció la posibilidad de implementar la ley de lemas, reclamada por algunos espacios del frente oficialista y aceptada como moneda de cambio por Bordet. Es por eso que el gobernador dejó que corra el tema en la agenda de la política local.

Los dos primeros respaldaron públicamente la iniciativa del primer mandatario con una foto que difundió el gobierno. Cresto prefirió no pronunciarse públicamente pero dejó trascender que estaría de acuerdo con la boleta única con la condición de que se acompañe también la sanción de una ley de lemas. De lo contrario, cree el concordiense, la BUP solamente beneficiaría a Rogelio Frigerio. Piaggio, el cuarto aspirante a la gobernación, también se posicionó a favor de la BUP y fue unos de los primeros en pedir a viva voz los lemas.

En la oposición, el consenso para la BUP podría negociarse, porque es un sistema de votación que vienen impulsando a nivel nacional y provincial. Lo que advierten es que no aceptan modificaciones a las reglas de juego electorales “a esta altura del año”. En Juntos por el Cambio, Frigerio ratificó su acompañamiento y también lo hizo Eduardo Caminal, presidente del PRO en la provincia, quien confirmó su “voto positivo” ante este medio.

El año legislativo termina el 15 de diciembre. Si en las sesiones ordinarias no se lograse la sanción, en la Cámara ya saben que habrá prórroga. Para eso, el bloque oficialista ya está trabajando y se espera que la próxima semana se pueda ver un primer borrador.

La base para la redacción del texto es el proyecto que el mismo Bordet presentó hace cuatro años, en abril de 2018. En ese momento, intentó una reforma electoral que proponía BUP además de integración de las minorías y paridad de género en la provincia. De ese lance, logró legislar la paridad de género. Para esta oportunidad, la minoría se elimina del proyecto original y se sostiene la base de la boleta única.

Aún con cierto consenso ganado, también en el entorno más próximo al gobernador advierten que el escenario no está clausurado. Cualquier situación podría proyectarse. “Todas las opciones están sobre la mesa” aclaran. Eso significa que podría haber BUP + Ley de lemas + modificación de calendario electoral, todo junto. O solo BUP, o solo desdoblamiento. O nada. Y que todo siga igual.

La ley de lemas, más complicada

El consenso que, calcula el oficialismo, podría conseguir para la boleta única no es tal cuando se consulta por la ley de lemas. En la oposición, quienes se animan a hablar insisten con rechazar cualquier modificación a las reglas electorales. Puntualmente, en el campamento PRO dicen que sería retroceder treinta años y que el oficialismo “está buscándole la vuelta” a un sistema electoral que “le termine cerrando” para ser competitivo en 2023.

El oficialismo reconoce que es una ley “complicada”, pero confía en que si logra un gran acuerdo del peronismo y el proyecto termina siendo unificador, va a salir. “Acá lo que se busca es la mejor estrategia. Saldrá la ley con mayor consenso dentro del peronismo”, se sinceró a los colegas de Letra P un legislador, que recordó que el oficialismo cuenta con la mayoría necesaria en la legislatura provincial.

Tras su gira en el sudeste asiático, este fin de semana el gobernador retomará su agenda. Se espera que la próxima semana, después de interiorizarse de lo que dejó el debate, Bordet tome una decisión. “Generamos el ruido que queríamos generar, ahora tenemos que esperar que él decida”, dicen en su equipo.