Hallaron a una persona fallecida dentro de un auto incendiado en Paraná y todo indica que sería un crimen por encargo y con mensaje mafioso o de características pasionales. El hecho ocurrió esta madrugada en calle Virrey Vértiz, detrás de la cancha del Club Ciclón del Sur, en la zona baja del barrio Anacleto Medina.
Según supieron los colegas de ANÁLISIS, la investigación está tras la posibilidad de un homicidio con ribetes especiales, por su forma de ejecución y perversidad. Aún no se oficializó la identidad de la víctima, aunque se supo que se trataba de un chofer del Ministerio de Salud "muy comprometido con su trabajo", llamado Marcelo Silvio Cabeza. Trabajaba en Salud desde julio del 2006 y a la vez tenía un monotributo en AFIP para estar dentro del negocio de alquiler de remises.
El auto, Renault Clio Mío, fue hallado a las 02.45 de la madrugada de este martes. El cuerpo estaba totalmente calcinado, tenía un balazo en la cabeza y aún se busca el celular para hallar más pistas en la investigación. En principio se entiende que quizás lo golpearon (o lo asesinaron) y luego lo trasladaron hasta el lugar en que apareció el cadáver. El cuerpo estaba en el asiento de atrás y los autores habían dejado la puerta trasera abierta en buena medida, para que el fuego pudiera avanzar más rápido.
El automóvil incendidado es propiedad de Gisela Paola Cabeza, quien también cumple funciones en el área de Salud de la provincia y pertenecen a una familia de trabajadores y considerados buenos vecinos históricamente. En principio, ella le prestó anoche, cerca de las 20, el automóvil a su hermano, chofer de Salud, quien sería la víctima hallada en el coche incendiado. No obstante, esa situación deberá ser confirmada por los médicos forenses, tras la realización de la autopsia correspondiente, en función del estado del cuerpo, que no permitía ningún tipo de reconocimiento de parte de sus familiares o allegados.
Los investigadores están tras la pista de un crimen mafioso. Por lo pronto, quedó comprobado científicamente que las manos halladas en el Volcadero de Paraná corresponden a la víctima encontrada en el auto incendiado. Fuentes policiales habían confirmado que durante la mañana de martes, fueron halladas dos manos atadas con un precinto dentro de una bolsa y no se descartaba que pudieran pertenecer a la víctima del hecho.
Los policías trabajan sobre posibles vinculaciones con el narcotráfico, "alguna abultada deuda" no cobrada o bien un hecho con características pasionales. No obstante, se entiende que en el episodio habrían existido por lo menos dos personas involucradas. En la base de datos crediticia del Banco Central de la República Argentina, la persona en cuestión -siempre y cuando sea confirmada su identidad, tal como se estima- tiene una deuda normal con dos entidades bancarias y un negocio de electrodomésticos.
La fiscal que está a cargo de la investigación es Melisa Saint Paul quien dispuso la intervención de la División Homicidios de la Policía de Entre Ríos y el gabinete completo de criminalística para lograr recabar todas las pruebas.
Fuente: Análisis Digital