Un triunfo que se hizo sentir en todas las jurisdicciones electorales entrerrianas. El Peronismo siquiera pudo ensayar una excusa o una doble lectura que disfrace tan rotunda derrota.
Es que de punta a punta, Frigerio, colectó una suma de votos tan importantes (257.868) que sumandos a los obtenidos por el actual Intendente de Chajari, Pedro Galimberti (126.831) y los de la tercera lista encabezada por González (13.956), alcanza al 51,78% de los sufragios (escrutadas el 99,22% de las mesas).
Durante la campaña todo hacía prever una baja participación de los votantes, que no fue tal como se esperaba, ya que mas del 72% de los electores habilitados concurrieron a votar.
Pero mas allá de una victoria en todo el territorio, hay distritos que por su historia favorable al peronismo, resuenan mas.
El departamento Concordia le otorgó a JUNTOS una diferencia de mas de 10% (47.7 a 37.4) y no es un dato menor, ya que el primer candidato del Peronismo es el actual Intendente en uso de licencia de la ciudad cabecera, Enrique Cresto. A lo que hay que sumar que el actual gobernador Gustavo Bordet, también de Concordia y dos veces intendentes de ese distrito.
El Departamento Gualeguaychú, otro de los lugares que mas respaldo le dio a Rogelio Frigerio, ya que en la sumatoria de listas, JUNTOS se distancia por mas de 30% al Peronismo (56.2 a 26.1) El condimento en este distrito es que el “líder” del peronismo y actual Intendente de la Ciudad cabecera, Martín Piaggio, es un férreo militante Kirchnerista y de La Campora.
Paraná como departamento fue donde mas votos obtuvo Frigerio y marca otra contienda perdida para el peronismo. JUNTOS arañó el 49% de los votos mientras que el Peronismo llegó apenas al 24%.
Y por último de los distritos denominados fuertes, vale analizar el Departamento Uruguay, de donde Frigerio obtuvo casi el 50% de los votos en la sumatoria de las listas, frente al 29% del peronismo.
La durísima derrota del peronismo hay que enmarcarla no solo en el contexto de pandemia y los errores groseros que viene teniendo el Kirchnerismo a nivel nacional. Sino que hay que poner mucha atención en la necesidad de los entrerrianos, de poner a la provincia en niveles de desarrollo comparables con nuestras vecinas Santa Fe y Córdoba, donde se apuesta a la creación de empleo e instalación de nuevas fuentes laborales que muchas veces no están relacionadas con megafabricas sino invirtiendo para potenciar el sector que hoy demanda el mercado como la industria del conocimiento.
El peronismo ha gobernado Entre Ríos de 1983 a la fecha durante 30 años y no ha logrado demostrar que los derechos que tanto manifiestan defender, se hayan mínimamente comenzado a cumplir.
Un sistema de salud que solo se sostiene por el enorme empeño que pone el personal, carente de inversión y de un programa serio de desarrollo. La educación en sus niveles mas bajos en la que los docentes deben dedicar cada vez mas tiempo a reclamar mejores condiciones laborales y donde los alumnos y alumnas se sienten cada vez menos atraídos por una metodología de enseñanza que nada tiene que ver con la era que corre y con las necesidades de la sociedad. Cada vez mas pobres en una provincia que tiene todo el potencial para que esto no suceda y tan solo una muestra de ello es el triste rotulo de la Ciudad de Concordia, donde el peronismo ha gobernado siempre y de donde han salido casi todos los gobernadores peronistas. Si bien este es solo el primer round electoral, noviembre está muy cerca y los entrerrianos han dejado un claro mensaje con su voto.
